
Como cada año hacia el final, os deseo lo mejor y os recuerdo. Os dedico un momento delicado y especial en el que os siento como seres que han compartido mi camino vital durante un curso. Seres que han vivido y disfrutado, también sufrido, de estos nueve meses.
Como agradecimiento a todos vosotros y a vuestra perserverancia, me gustaría que vierais esta presentación que he preparado con las fotografías maravillosas de las pizarras que habéis rellenado en el Aula de Torrelaguna y de La Cabrera.
En ellas, también recuerdo y homenajeo a mis compañeros, con los que todo se hace más fácil, más agradable y más bonito. Los errores, las equivocaciones, los malos entendidos, quedan olvidados por esta luz estival que atraviesa ligeramente los visillos de mi ventana. Abajo, el rumor cálido de risas infantiles y correteos de verano. Me rodea una tarde de plácida calidez, de sorpresas que reflejan los grandes ojos de la ilusión pura. Que me libera del sinsentido y me impregna del placer de vivir, de sonreír y de compartir con cariño.
Eso os dejo. Toda yo. Feliz verano a tod@s.
Pinchad aquí.