El pasado miércoles, los alumnos de Nivel II de La Cabrera me pidieron encarecidamente que hiciéramos una actividad sobre las Vanguardias. Principalmente, dadas las fechas en las que estamos, además de que la próxima semana tienen el último examen, que consta de muchos contenidos, era para no dar más materia. Que ya lo sé... Sin embargo, tocaron la tecla adecuada y despertaron mis ganas de probar.
Así que, practicaron la escritura automática del movimiento vanguardista del Surrealismo. Tres minutos en silencio y cinco escribiendo lo que fluyera de sus mentes. Es verdad que no era el ambiente adecuado completamente y que su predisposición tampoco. Aún así, lo intentaron con mucho afán y esta fotografía es el resultado de su trabajo.
Dado que muchos no querían que se conociera, ni su letra, ni sus escritos, eliminé los nombres y solapé unos textos encima de otros. Muy provechoso. Enhorabuena, chicos. Y gracias.
Como el verso de Quevedo, aunque en aquel caso era su amor el que tendría sentido, pretendo que en este blog todo tenga sentido: mis palabras, tus palabras, nuestras palabras. Ya que esa es la característica principal del ser humano, vamos a comunicarnos, a investigar y a deleitarnos con nuestra materia de Lengua castellana y Literatura. Aquí, aunque las palabras vuelen con el viento y desaparezcan, ¡tendrán sentido!
viernes, 30 de mayo de 2014
lunes, 26 de mayo de 2014
Te regalo mi placer: Alba nos regala "Platero y yo" de Juan Ramón Jiménez

De ese momento, surgió esta etiqueta "Te regalo mi placer". Ya habéis leído algunas entradas que etiqueto así. En ella, están los textos que nos sugirió Alba y que eran un placer para ella leerlos. Quería compartiéramos ese disfrute de la lectura.

Mi homenaje a la maravilla lírica y etérea de Platero, a uno de mis poetas preferidos -casi el que más- y a Alba, por nuestro reencuentro.
Os lo muestro tal cual lo monté en su momento, tal y como me lo envió Alba.
En esta ocasión, tenemos el placer de leer o releer dos cuadros del libro Platero y yo de Juan Ramón Jiménez. Y es, de nuevo, Alba Blasco, alumna de Nivel II de La Cabrera la que nos trae aquí los textos y los comentarios que le han generado.
CXXXII
LA MUERTE
Encontré a
Platero echado en su cama de paja, blandos los ojos y tristes. Fui a él y lo acaricié hablándole y quise que se levantara....
El pobre se
removió todo bruscamente, y dejó una mano arrodillada..... No podía.....
Entonces le tendí su mano en el suelo, lo acaricié de nuevo con ternura y mandé
venir a su médico.
El viejo Darbón,
así se lo hubo visto, sumió la enorme boca desdentada hasta la nuca y meció
sobre el pecho la cabeza congestionada, igual que un péndulo.
-Nada
bueno, ¿eh?
No sé que contestó... Que el infeliz se
iba...Nada... Que un dolor... que no sé que raíz mala... La tierra entre la
yerba...
A mediodía, Platero estaba muerto. La
barriguilla de algodón se le había hinchado como el mundo, y sus patas rígidas
y descoloridas, se elevaban al cielo. Parecía su pelo rizoso ese pelo de estopa
apolillada de las muñecas viejas, que se cae al pasarle la mano, en una
polvorienta tristeza...
Por la cuadra el silencio, encendiéndose cada
vez que pasaba por el rayo de los de la ventanilla, revolaba una bella mariposa
de tres colores...
CXXV
MELANCOLÍA
Está tarde he ido con los niños a visitar la
sepultura de Platero, que está en el huerto de la Piña, al pie del pino redondo
y paternal. En torno, abril había adornado la tierra húmeda de grandes lirios
amarillos.
Cantaban los chamarices allá arriba, en la cúpula verde, toda pintada de
cenit azul, y su ritmo menudo florido y reidor, se iba en el aire de oro de la
tarde tibia, como un claro sueño de amor nuevo.
Los niños, así que iban llegando, dejaban de gritar. Quietos y serios,
sus ojos brillantes en mis ojos, me llenaban de preguntas ansiosas.
-
¡Platero amigo! -le dije yo a ala tierra-;si, como pienso, estas tu ahora en un
prado del cielo y llevas sobre tu lomo peludo a los ángeles adolescentes,¿Me
habrás, quizá, olvidado? Platero dime: ¿te acuerdas aún de mí?
Y, cual contestado mi pregunta, una leve mariposa blanca, que antes no
había visto, revolaba insistentemente, igual que un alma, de lirio en lirio...
Un
libro que siempre me hace llorar. Tan hermoso que caló mi corazón profundamente…
Su poesía me tiene cautiva...
No tengo palabras, sólo sentimiento.
Gracias a Juan Ramón Jiménez y su mariposa
blanca.
miércoles, 14 de mayo de 2014
viernes, 9 de mayo de 2014
Leyendo La casa de Bernarda Alba de Lorca. Nivel II

En este enlace podéis leer el libro. Federico García Lorca la terminó de escribir poco antes de que morir fusilado al comienzo de la Guerra Civil española, en 1936, pero no se publicó hasta 1945. Un buen análisis de la obra lo tenéis aquí, en Wikipedia.
Lorca, en buena parte de su producción teatral, vemos que dedica sus preocupaciones a las mujeres, a las que considera seres marginados por la sociedad, apartados y menospreciados. En sus tres grandes tragedias Yerma, Bodas de sangre y La casa de Bernarda Alba, además pesa mucho la sociedad del momento, que se acentúa más en un pueblo pequeño de la España profunda. Una sociedad controlada y condicionada por la apariencias, la religión, el qué dirán y la supremacía y violencia del hombre, del macho. Todo esto, en la obra se ve reflejado de forma clarísima. A nadie le queda duda de que a Bernarda le preocupa mucho más la imagen que da su familia a sus vecinos y al pueblo, al que desprecia, que pensar en la felicidad de sus hijas o en la suya propia. De hecho, la niega. Cuando Poncia le sugiere que debería haberse marchado de ese pueblo a otro más grande, Bernarda, aun odiando su pueblo, rechaza la propuesta.
Las mujeres de esta obra son seres conformistas, en parte, pero también, obligadas, por su condición de ser mujer, a satisfacer esas convenciones sociales en las que, como en una ocasión dice Amelia, se les perdona todo a los hombres. Lorca incide en esa situación de víctima de la situación social en la que viven las mujeres. En otra ocasión, dirán "nacer mujer es el mayor castigo".
La única que se rebelará contra esta situación opresora de pasar los 8 años encerradas en casa guardando luto por la muerte del padre, será Adela. La que busca el amor de Pepe, el Romano; su futuro cuñado, interesado por el dinero de su hermana Angustias, que le saca 14 años. Adela se entregará al placer carnal como liberación al encierro que sufre en su propia casa y por su propia madre. Y, sin embargo, ni siquiera ella conseguirá cambiar nada. Porque para poder "liberarse" algo debe pasar a los lugares casi marginales de la sociedad. Debe pasar a ser la "querida" de un hombre casado que estará con ella cuando él quiera. Así se lo dice Adela a Martirio al final de la obra. Y la única liberación final será su suicidio.
Pero, ¿de verdad se libera?
En este blog tenéis un análisis muy completo de la obra, el autor, los personajes de la misma, el contenido social, etc. Merece la pena que le echéis un vistazo.
Y, por último, y ya que la hemos visto en clase, os dejo la película de Mario Camus. Desde mi punto de vista no tiene tanta fuerza como ver la obra en un teatro y creo que no fue adecuada la elección de Bernarda. Julia Gutiérrez Caba es una gran actriz, pero no le va el papel duro, dictatorial y un poco masculino de Bernarda Alba. También hay otros personajes poco dibujados y no muy creíbles, pero es muy fiel al texto.
Espero que la disfrutéis, como siempre.
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