"Escribir en Madrid es llorar; es buscar voz sin encontrarla, como en una pesadilla abrumadora y violenta."
Estas palabras muestran claramente la amargura espiritual del que se considera el primer periodista español. Larra fue tan adelantado a su tiempo que sufrió por la situación en la que se encontraba España y los españoles a principios del siglo XIX.
Su vida fue convulsa, pero también llena de pasión. Y fue una pena que terminara tan pronto, ya que era una de las mentes privilegiadas de la época. Luchó toda su vida por una sociedad más justa, instruida y crítica. No dejéis vosotros de luchar por lo mismo.
A continuación, tenéis El Madrid de Larra en un vídeo del periódico El Mundo en la conmemoración de su bicentenario en 2009.
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